Tradicionalmente llamada "criolla", es la variedad más antigua y adaptada en Argentina. Se trata de la variedad más importante en la región de Maipú, Mendoza y la más representativa de la olivicultura nacional.
Color Amarillo con intensos matices verdes.
En nariz muy expresivo y complejo, recuerda a pasto recién cortado y hojas de tomate.
En boca presenta un amargo y picante intenso acompañado de un frutado característico donde predominan notas verdes que recuerdan a tomate, almendra y hierbas frescas.